sábado, 14 de abril de 2018

Amor Incondicional



A veces pensamos que el amor incondicional es algo gigante. He aprendido en los últimos tiempos que el amor incondicional se manifiesta en los pequeños detalles de cada día, en las acciones cotidianas, y la diferencia está en lo que sientes y reflejas cuando realizas la acción.

No es lo mismo bañarte como en una carrera que bañarte de manera consciente y amorosa contigo mism@ dándote cuenta y disfrutando lo que sientes al contacto con tu piel, sintiendo el agua, enjabonándote, lavándote el cabello con ternura, suavemente y con amor.  

Lo mismo sucede cuando baño a mi mamá.  Pensaba que era cuestión de hacerlo lo más rápido posible y que quedara limpia.  Y ahora me doy cuenta que bañarla desde el amor incondicional implica, entre otras cosas, escuchar lo que quiere, sin cuestionar.  Cuando eso ocurre termina pasando que bañarla pasa de ser un trabajo agotador a un rato de placer y de cariño e intimidad madre-hija invalorable.

Ejemplos hay muchos y oportunidades infinitas. Fíjate cómo sirves la comida a otro, cómo manejas tu carro, si te bañas con tu pareja fíjate cómo comparten ese espacio, si se acarician, cómo se acarician, en qué tono se hablan, qué sientes cuando lo acaricias y te acaricia... Si preparas la comida date cuenta cómo manejas los ingredientes, cómo los mezclas, cómo los cocinas, cómo los sirves... Cuando lo haces desde el amor, te darás cuenta de que sientes bienestar, te sientes content@...

Hay momentos en los que, lo reconozco, pierdo la paciencia y la juzgo y me juzgo.  En estos días estaba buscando la pelota que le había llevado para que hiciera ejercicios con sus manos para que se le fortalezcan y se disminuya la velocidad con la que la artrosis va haciendo estragos.  No la encontré y me dijo: "Es que se la dí a Mercedes"... Yo me molesté y dije algo así como que "No entiendo qué es lo que te pasa".  Estaba realmente molesta.  Y mi mamá lo único que me dijo fue: "No todas las cosas Leonor son para ser entendidas.  Ella la necesita más que yo."  

Y fue en ese momento que me di cuenta que mi mamá había actuado desde su amor incondicional y yo, desde el juicio.  Y en ese instante, al darme cuenta, sentí como si me hubiera pasado un switche.  Quizá en otro momento habría seguido, no juzgándola a ella sino a mí misma por mi egoísmo, y entonces decidí ser compasiva conmigo y asumir mi constante proceso de aprendizaje, desde mi amor incondicional.

No te desanimes por las caídas (ni las tuyas ni las de otro), así es el proceso... Habrá veces en las que incluso puedes entregarte y el otro no lo ve o no lo agradece como estás esperando.  El amor incondicional es independiente de lo que el otro haga y el hecho de que a veces no lo logremos no implica que seas mal@ o que no haya momentos en los que sí sientas y manifiestes ese amor.

La buena noticia es que si te tratas a ti mism@ con amor, te observarás sin juzgarte y la próxima vez será mejor.


No hay comentarios.:

Publicar un comentario

Importancia de visitar a los ancianos con deterioro cognitivo

Podrías creer que un anciano (familiar o amigo) con deterioro cognitivo no se da cuenta de su entorno o de quiénes están presentes en su vid...